
Los norteños jugaron uno de sus partidos más flojos en lo que va del torneo. Sufrieron para igualar 1-1 contra un Cienciano que llegó a Chiclayo enchufado tras la inyección anímica impuesta por el técnico argentino Marcelo Trobbiani.
Desde el inicio, los imperiales salieron decididos a controlar el partido y sorprender a los chiclayanos con sus tres delanteros.
Fue así que a los catorce minutos del primer tiempo, el zaguero Jesús Álvarez perdió un balón en salida y el argentino Juan Cavallo sacó un disparo de media distancia que sorprendió a Erick Delgado. Después del golazo, que enmudeció el Elías Aguirre, quedó la sensación de que Cienciano podía mostrarse más agresivo, pero la discutida y quizás injusta expulsión del volante Héctor Quintanilla, a los 41 de la inicial, los hizo replegarse.
Despertó el "Ciclón"
Aurich salió con todo en el complemento para remontar el marcador. El "café cargado" del técnico Franco Navarro hizo efecto, sobre todo cuando apareció el goleador histórico Sergio Ibarra para fabricar el penal que Mayer Candelo ejecutó para poner el 1-1 que nunca se movió. Gol de camarín y en el banco visitante Trobbiani desfogaba su bronca con el cuarto árbitro.
El "Checho" y Guadalupe tuvieron en sus pies el triunfo, pero no convirtieron. El Aurich comparte ahora la punta con Alianza Lima que ganó Trujillo. Mientras tanto, Cienciano ilusiona a los cusqueños tras su meritoria actuación.
Gerardo Pérez
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