Ambas escuadras necesitan los puntos para escalar en las clasificaciones de la liga argentina. El partido será el domingo en la ´Bombonera´.Boca Juniors y River Plate, los clubes más populares del fútbol argentino, comenzaron a palpitar el superclásico del domingo próximo por el Torneo Clausura 2009, cuando ambos desplegarán todo su poderío en busca de un triunfo que les permita entrar a la lucha por el título.
A pesar de que River aparece en el cuarto puesto de la tabla y Boca se ve mucho más lejos del lote de vanguardia, el encuentro entre auriazules y millonarios, que se jugará en el mítico estadio La Bombonera, promete ser parejo y de pronóstico incierto.
Boca parece estar más ocupado en la Copa Libertadores de América, su gran objetivo del semestre, y sin urgencias en el ámbito local tras la conquista del Apertura 2008, pero de todos modos el entrenador Carlos Ischia contará con sus mejores jugadores para el duelo ante los rivales eternos.
A pesar de una molestia en el tobillo derecho, está prácticamente confirmada la presencia del estelar Juan Román Riquelme, como también se prevén los regresos en la zaga de los paraguayos Julio César Cáceres y Claudio Morel Rodríguez, ambos recuperados de desgarros.
En cuanto al ataque, el director técnico alineará a su pareja preferida, Martín Palermo y Rodrigo Palacio, que en lo que va del año sólo pudieron compartir un par de encuentros, en los que Boca le ganó al paraguayo Guaraní por idéntico resultado (3-1), por la Copa.
"Me cuesta caminar un poco, pero el partido no me lo voy a perder. Ojalá salga un lindo partido para nosotros, porque lo necesitamos. Además, queremos darle esa alegría a la gente. En el torneo local quedamos un poco lejos y no podemos darnos el lujo de seguir dejando puntos en el camino, así que tenemos que ganar", señaló Riquelme.
De su lado, River llega en una posición expectante aunque dentro de una situación inestable, ya que a pesar de estar en la lucha por el título su rendimiento está lejos de convencer. Además, su desempeño en la Copa dista mucho de ser bueno.
Boca cedió buena parte de sus aspiraciones en el Clausura el domingo pasado al perder 1-0 con Estudiantes, en un partido en el que alineó una formación con suplentes, mientras que River, que tenía la posibilidad de arrimarse al líder Vélez Sarsfield, sólo pudo rescatar a duras penas un empate como local (2-2) con Gimnasia La Plata.
"Pese a que no estamos jugando bien seguimos muy cerca de los punteros Ganar nos serviría para convencernos de que podemos pelear por el campeonato.Y por la jerarquía de sus jugadores, no podemos tener distracciones contra un equipo como Boca", evaluó el "Muñeco" Marcelo Gallardo, armador del ataque riverplatense.
De su lado, el mediático delantero Cristian "Ogro" Fabbiani ya se había encargado de calentar el clima al decir que "en la cancha de Boca, me van a tener que marcar entre todos. Y voy a tirar "caños" (pasar el balón entre las piernas). La Bombonera se va a callar con mi juego".
Sin embargo, de modo elíptico y sin mencionarlo, Gallardo se encargó de bajarle los decibeles a su compañero al expresar que "hay que jugar más y hablar menos".
Boca domina el historial oficial con 67 triunfos contra 61 de River sobre un total de 183 encuentros.
AFP
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